La compañía de teatro cántabra Ábrego Producciones estrena su obra `Blanco roto´, de Pablo Escobedo, este sábado 23 de enero, a las 19:30 horas, en la sala Argenta, con la que busca arrojar luz sobre una de las etapas más oscuras de la historia española del siglo XX.
Este espectáculo dramático nos trae el recuerdo de la contienda con la sombra más alargada del siglo XX en nuestro país, la Guerra Civil. Este enfrentamiento se llevó consigo la vida de 540.000 personas, medio millar de almas ausentes, una ausencia que mediante el silencio llevan a esas personas al olvido. Desde que en 1939 terminase la contienda, son innumerables las personas y asociaciones que intentan recuperar los nombres de quienes perecieron durante la guerra, ya que más allá de bandos, las pérdidas no son de combatientes, sino de personas. Personas que tienen padres y madres, hijos e hijas que quedaron viudos y huérfanos. Familiares que, ante la ausencia del semblante, buscan la presencia en el recuerdo.
Este es el punto de partida de `Blanco roto´, una obra que narra la búsqueda que José Antonio Larrinoa (un jubilado vasco) comenzó para encontrar los restos de su tío, muerto durante el enfrentamiento nacional. Durante su búsqueda contó con la colaboración del párroco de Limpias y juntos hallaron unos papeles que contenían los nombres de 74 soldados que fueron enterrados tras morir en los enfrentamientos en los valles del Asón y Agüera.
Estos documentos, encontrados en el mes de diciembre de 2017, albergaban los nombres de soldados del ejército republicano y la causa de su fallecimiento, ya que muchos de ellos perdieron la vida en un hospital de campaña instalado en el antiguo Palacio Eguilior, lugar que ahora ocupa el Parador de Limpias. Gracias a este hallazgo se puede rescatar del olvido a muchos soldados. Esta lista la redactó el cura Gregorio Ungo el día 11 de septiembre de 1938 y permitió, de una manera u otra, que la memoria de estas personas quedase resguardada. Con esta enumeración es posible cerrar heridas que, lamentablemente, a día de hoy siguen abiertas, como ha asegurado el historiador Fernando Obregón, quien ha resaltado que la `lista de Larrinoa´ ha rescatado a muchas personas del olvido.
El hallazgo de esta lista hace tan solo cuatro años hace pensar en la cantidad de personas olvidadas que hay por el resto de territorio nacional. Un descubrimiento que debe servir como apoyo para sacar del olvido a centenares o miles de personas olvidadas y solucionar un problema enraizado en nuestra sociedad.